domingo, 1 de febrero de 2009

Así fué que entendí o más bien que des-entendí.. creo??!!

-Porke?
Fué la pregunta...

-No era nuestro momento
La respuesta...

En ese momento no lo entendí en verdad no lo entendí yo creía que si, que eramos todo lo que podiamos ser, pero me basto ver que nos falta mucho saber sobre nosotros, como piensa y hasta como nos vemos el uno al otro, sentir esa desconfianza, esas cosas que ocultar, aquello que es mejor borrar...para darme cuenta que si... que tuvo razón que en verdad no estabamos listos... ni en ese momento ni ahora...

Falta trabajar!!, que si bien acepto tuvimos suerte de encontrarnos, la suerte no lo es todo, y reconozco que con suerte no llegamos aquí, los dos trabajamos de una u otra manera...

Y aquí es donde entonces me pregunto en que momento dejamos de hablar de todo??

porqué al inicio de una relación quieres saber todo de una persona y que esa persona sepa todo de ti?...

Porque ahora solo sabemos lo que el otro kiere y/o le conviene que sepamos??... y solo lo disfrazamos de olvidos o cosas sin importancia?

Como es que se llega aquí? porque? es posible recuperar eso perdido?

Alguién sabe??
Porque yo ya no encuentro esta vez la respuesta...

3 comentarios:

Calypso dijo...

Al principio de una relación todo es emocionante y se ve desde una perspectiva diferente. No conoces nada de la otra persona y proyectas sobre ella todo lo que anhelas encontrar en ese alguien que pueda ser tu compañero. La cruda realidad es que a medida que pasa el tiempo y vas conociéndol@( y conociéndote) comprendes que lo que habias visto en un principio no era más que un espejismo y que, a veces, somos nosotros mismos los que complicamos las cosas el doble de lo que son en realidad.


un abrazo!=)

Mar dijo...

Siempre he creído que una vez que la confianza se pierde, es irrecuperable.

Y no necesariamente porque el otro la haya traicionado, sino porque a veces... simplemente sucede.

Nada nos queda. Mejor sólo agradecer por lo sucedido, que vivir con pesar por lo que no sucedió o lo que se perdió.

Nacho dijo...

En el amor ha de haber equilibrio entre cabeza y corazón. Cuando todo comienza es el corazón quién lleva el ritmo de los pasos a seguir, pero ese ritmo se va a apagando con el tiempo. En el momento en que la cabeza tiene más participación que el corazón comienzan las dudas, los errores y las idioteces.

Como tú bien dices, hay que trabajar para mantener el equilibrio. No es una tarea fácil, hablo desde la experiencia, pues ese también fue mi fin.

Un saludo.